martes, 8 de julio de 2008

Confirman Que la Especie Humana Estuvo Dividida en Dos Grupos Durante la Mitad de Su Historia

7 de Julio de 2008.

Según los resultados de un nuevo estudio, la especie humana estuvo dividida en dos grupos aislados durante la mitad de su existencia en África. Un cambio climático, la reducción de las poblaciones y las condiciones ambientales adversas, pudieron haber causado y mantenido esta separación.


El matemático Saharon Rosset, de la Escuela de Ciencias Matemáticas de la Universidad de Tel Aviv, trabajó con Doron Behar del centro Médico Rambam, quien dirigió el equipo de investigación, para analizar ADN africano. Su objetivo era estudiar pautas poblacionales confusas de cientos de miles de años atrás.

Los científicos creen que hace 60.000 años, los humanos anatómicamente modernos comenzaron sus viajes épicos para poblar el mundo. Este periodo de tiempo ha sido el foco principal de las investigaciones antropológicas de tipo genético. Sin embargo, se sabe relativamente poco sobre la historia demográfica de nuestra especie a lo largo de los 140.000 años previos en África.

El nuevo estudio brinda elementos que ayudan a comprender mejor la historia demográfica inicial de las poblaciones humanas antes de partir de África. Estas poblaciones humanas iniciales eran pequeñas y estuvieron aisladas durante decenas de miles de años.



La investigación del equipo se basó en un censo del ADN africano mitocondrial. Este censo, considerado el más amplio de su tipo, incluyó 600 genomas completos de ADN mitocondrial de las poblaciones indígenas de todo el continente.

El ADN mitocondrial, heredado a lo largo de la línea materna, se utilizó en 1987 para descubrir la edad aproximada de la famosa "Eva Mitocondrial", el ancestro femenino común más reciente de todos los seres humanos actuales. Este trabajo ha progresado desde entonces, demostrando de modo inequívoco que la Eva Mitocondrial fue una mujer africana que vivió en alguna época de los últimos 200.000 años.

Datos recientes hacen suponer que el África Oriental sufrió una serie de sequías masivas hace entre 90.000 y 135.000 años. Posiblemente, este cambio climático contribuyó a la prolongada separación entre las poblaciones. Lo sorprendente es el periodo de tiempo que las poblaciones estuvieron separadas; abarcó la mitad de toda nuestra historia como especie.

Información adicional en:

Universidad de Tel Aviv

La experiencia es la madre de la intuición

Un estudio realizado por la Universidad Linköping (Suecia) demuestra que la intuición tiene una base neurobiológica.

Según ha explicado el investigador Lars-Erik Björklund, autor del estudio, en varias investigaciones realizadas desde 1980 con enfermeras se demostró que aquellas que habían ejercido su profesión durante un largo tiempo eran también las que hacían juicios más acertados y rápidos. El hecho de que las personas con una amplia experiencia son a menudo mejores que el resto en lo que hacen no es nada nuevo, asegura Björklund, si bien hasta el momento no se había encontrado una explicación.

Hace unos años, los neurocientíficos descubrieron que el cerebro humano tiene un sistema dual para recibir y analizar las impresiones sensoriales, conscientes e inconscientes. En las inconscientes, las impresiones sensoriales son comparadas con imágenes que ya teníamos en almacenadas en el cerebro.

Además, las personas también recuerdan el resultado de sus actos y las consecuencias, positivas o negativas. De este modo, ante una situación, teniendo en cuenta las impresiones sensoriales asociadas, son capaces de predecir lo que va a suceder.

Cuantas más situaciones distintas vive una persona, más rico es su álbum de imágenes y será más probable que pueda reaccionar ante una situación, reconocerla y manejarla. "Puede que lo que llamamos intuición sea una cuestión de olores, de gestos y, en definitiva, una mezcla de impresiones", asegura Björklund, quien también llama a la intuición “sabiduría práctica”. Según el investigador, esto implica que hay que reconsiderar las horas que se dedican a la formación práctica de los profesionales. "Necesitamos ver, sentir, oler, escuchar, saborear y experimentar; este conjunto de datos no puede ser sustituido por un curso de literatura", subraya.

Universidad Linköping (www.liu.se )

Reconocimiento de rostros

Del ingente mundo de los insectos, sólo las llamadas “avispas de papel” son capaces de reconocer a otros individuos de su especie por los rasgos o patrones de su cara. ¿Son acaso superdotadas? Parece que nada de eso, según Wulfila Gronenberg, de la Universidad de Arizona, que ha estudiado tal habilidad en estas avispas. Tras comparar los cerebros de ejemplares que poseían la capacidad de identificar caras con otros que carecían de ella, Gronenberg constastó que no hay diferencias apreciables ni en las estructuras neuronales ni en los órganos visuales.

Así pues, el reconocimiento facial apenas implicaría más desarrollo que discriminar entre diferentes predadores o alimentos, lo que puede aclarar cómo evolucionó esta facultad en mentes animales más avanzadas.