viernes, 5 de noviembre de 2010

EL HUMOR Y LAS TRANSGRESIONES DEL CODIGO MORAL

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¿Qué hace que algo resulte gracioso? Los filósofos desde Platón han estado debatiendo sobre esa cuestión. Dos psicólogos ahora consideran que han encontrado una fórmula posible: El humor es el resultado de una transgresión benigna del orden establecido.
Muchas de las viejas teorías sobre las raíces del humor se han quedado cortas de un modo u otro, argumenta A. Peter McGraw, de la Universidad de Colorado en Boulder, quien ha realizado el estudio junto a Caleb Warren.

Freud pensó que el humor era resultado de una liberación de tensión, otra teoría sostiene que el humor proviene de la incongruencia, e incluso otra defiende que es el resultado de un sentido de superioridad.

Los autores del nuevo estudio, sin embargo, hacen notar que todo esto podría aparecer si accidentalmente alguien mata a su esposa, y en cambio eso no sería gracioso. Ellos piensan que una situación con esos ingredientes básicos podría  resultar graciosa sólo si es benigna o al menos parece serlo.

En uno de los experimentos para poner a prueba su hipótesis, los investigadores comprobaron si apreciar como benigna una violación moral la hacía más graciosa. En su experimento, los participantes leyeron sobre una situación en que una iglesia, o bien una entidad financiera, sorteaba un vehículo todoterreno para así atraer nuevos feligreses o nuevos clientes. A los participantes no les pareció escandalosa esa situación cuando la protagonizaba la entidad financiera. Sin embargo, cuando era la iglesia la que intentaba atraer miembros con la rifa, hubo gente que se sintió indignada.

Se comprobó que la apreciación personal de si esa situación en el caso de la iglesia era o no cómica dependía en parte de si la persona solía acudir a una iglesia. Quienes habitualmente no asistían a ella eran más propensos a pensar que la rifa organizada por la iglesia causaba risa.

Los investigadores piensan que esto es el resultado de que quienes no suelen ir a la iglesia acostumbran a ser personas que no se sienten particularmente comprometidas con el carácter sagrado asociado a  las iglesias, así que para ellas la violación moral del caso de la rifa resulta benigna.

Otro experimento confirmó que las personas que tienen mayor distancia psicológica respecto a una violación moral son más propensas a que ésta les parezca divertida.
Scitech News

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